El Trastorno Obsesivo-Compulsivo conocido como TOC, es un trastorno que pertenece al grupo de los trastornos de ansiedad, al igual que el trastorno de estrés postraumático (TEPT) y el Trastorno de ansiedad generalizada (TAG) y se caracteriza por tener obsesiones y compulsiones.
Las obsesiones causan un gran malestar y mucha ansiedad, son pensamientos, ideas, imágenes o impulsos que se dan de forma recurrente y que persisten en el tiempo. Estos se producen de forma involuntaria, y son pensamientos que invaden la conciencia, son vividos por la persona como algo que no tiene sentido alguno.
Las compulsiones se realizan para neutralizar la ansiedad, son conductas que se repiten y que se realizan bajo determinadas reglas y de forma estereotipada.
¿Cómo se distingue un pensamiento obsesivo de un pensamiento compulsivo?se distingue por que en el caso del pensamiento compulsivo es voluntario y los pensamientos obsesivos son intrusos.
¿Qué es el “pensamiento mágico” dentro del TOC? El pensamiento mágico es que la persona piensa que si realiza tal ritual no va a ocurrir algo que quieren evitar que suceda.
Las personas que tienen Trastorno Obsesivo-Compulsivo tienen consciencia mórbida, es decir que tienen consciencia de enfermedad.
¿Por qué se da el TOC?
Se piensa que puede tener que ver con los circuitos neuronales, que estos no funcionen de una forma adecuada y por eso la persona tiene TOC, en realidad tiene una tendencia familiar.
Los síntomas del TOC por lo general empiezan en la infancia o la adolescencia, siempre dependiendo de la persona y el ambiente.
¿Cuáles son los síntomas del TOC?
Dentro de las obsesiones y las compulsiones más frecuentes en personas con TOC están:
Obsesiones:
- Tener miedo a contaminarse
- Ideas agresivas o de contenido sexual
- Tener miedo a causar daños a otros, o que le pase algo a un amigo, familiar, entre otros.
- Religiosidad excesiva
- Tener pensamientos prohibidos
- Necesidad de decir o confesar
- Necesidad de simetría
Compulsiones:
- Lavarse
- Tocar
- Ordenar
- Acumular (no poder tirar nada)
- Repetir una acción hasta hacerla “bien”
- Asegurarse de haber cerrado la puerta, de haber cerrado el agua, de haber cerrado el gas.
- Contar objetos o hasta un determinado número
- Rezar
Dentro del TOC se pueden diferenciar distintos tipos:
Verificadores: son las personas que inspeccionan de una forma excesiva, siempre con un propósito de evitar que suceda una determinada catástrofe.
Limpiadores: son las personas que tienen obsesiones que están relacionadas con la contaminación a través de algunas situaciones u objetos.
Repetidores: son aquellas personas que realizan acciones de forma repetitiva.
Ordenadores: son personas que quieren que las cosas que los rodean se ordenen de acuerdo con pautas rígidas, también incluyendo esto distribuciones simétricas.
Acumuladores: son personas que tienen colecciones de objetos que no significan nada para ellos pero de los cuales no pueden desprenderse.
Atormentados y obsesivos puros: estas personas tienen pensamientos negativos que se dan de forma reiterada, y los cuales resultan incontrolables, incluso son perturbadores para la persona.
Sexuales: son personas que tienen pensamientos sexuales de forma recurrente, incluyendo temores relacionados con lo sexual.
¿Cómo se trata el TOC?
Por lo general se trata con medicación en conjunto siempre con una psicoterapia, la más conveniente es la Cognitivo-comportamental. En este tipo de terapia la persona va a poder aprender a llevar su TOC de la mejor manera posible. La mayoría de las personas necesitará tomar la medicación de por vida, o al menos por un tiempo indefinido.
Las personas que tienen TOC tienden a padecer depresiones más graves que el resto que tienen otros trastornos de ansiedad, es decir que el TOC y la depresión son dos enfermedades que tienen alta co-morbilidad entre sí. La depresión en personas con TOC oscila entre el 17% al 35 %. Igualmente esto no significa que una persona con TOC tenga que tener si o si depresión, sino que cuenta con una posibilidad alta.